sábado, 11 de mayo de 2013

Garmo Negro con esquís

Vista la nieve que hay, nada mejor que aprovecharla con los esquís y en el Garmo Negro. Todo empieza siempre con la misma pregunta: ¿A dónde vamos este finde? Y esta vez se nos ocurrió que el Garmo Negro podría ser nuestra respuesta. Llamo también a Mikel para que venga con esquís. Total que quedamos a las
6 h en Mendillorri y de ahí en poco mas de dos horas y media nos plantamos en el Balneario.

Empezamos a subir poco a poco por el bosque hasta la mallata baja y al poco rato la nieve ya era continua. Decidimos seguir a partir de ese momento con esquís (más o menos donde se acaban los árboles). Al final, llegamos a la mallata alta y la vista es espectacular con el Garmo Negro y el Argualas tan arriba. "Tan arriba" significa que todavía te queda muuucho rato para llegar.


Observando su presa...

El día invitaba a hacer fotos a los Batanes

Subimos por el tubo que hay enfrente nuestra que, al ser la ruta normal con nieve, hay una huella perfecta que va haciendo zig-zags hasta llegar al final de este donde ya se va encarando dirección al collado. No se si era el calor o la desesperación de ver a Mikel como iba tan ligero con los esquís que parecía que el final del tubo no llegaba, pero al final llegó. El ladeo es prácticamente el único descanso que tiene este monte, porque por lo demás... un peñazo si no fuera por las vistas y por la bajada con esquís que tiene.

El tubo y el ladeo al collado

¡Ya se ve el collado! Pero eso no significa que estemos llegando. Más o menos cuando se ve por primera vez, yo calculo que quedan unos 20-30 min. para llegar.

Cuando llegamos al collado cambiamos esquís por crampones y piolet y p'arriba. La subida se hace a gusto con la nieve dura sin hundirte y en poco tiempo ya estamos en la cima disfrutando de las vistas tan preciosas de este monte.


Últimos metros al collado

En la cima del Garmo Negro

Los Infiernos vistos desde la cima

Mikel en la cima 

Después de comer, beber y sacar fotos para la posterioridad, decidimos bajar desde arriba, ya que la nieve era perfecta: ni muy blanda para estar sopaza, ni muy dura para que los cantos no agarren. Ideal, vamos.

Con cuidado y buen pie, llegamos al collado y de ahí por el mismo tubo de subida, que ahora misteriosamente se había hecho más corto llegamos hasta la mallata alta y la atravesamos hasta el otro lado para bajar hasta el comienzo del bosque, donde nos espera una corta bajada hasta el Balneario pero cargados con los esquís, que después de haber hecho el Garmo Negro, ya no importa llevarlos.

Primeros metros desde la cima

Bajada desde el collado

Con zoom

Vistas desde el Balneario


Un saludo y a disfrutar del monte!!

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