Hoy nos hemos levantado con intenciones
de ir al pirineo, pues en teoría venía bastante buen tiempo. Pero
antes de salir, miramos por la ventana y cual es nuestra sorpresa que
todo el cielo está muy nublado y hace bastante calor. Pues nada,
¿Qué hacemos?
Nos pegamos un hora en casa debatiendo
dónde ir. Al final, consideramos que ya hemos dicho el nombre de
demasiados montes y nos decantamos por el primero que habíamos
dicho: el Auza. Total, que cogemos el coche y nos vamos dirección a
Elizondo para luego ir al puerto de Izpegi.
Empezamos a subir por un bosque, más
bien por el lado francés. Este camino empieza bajando para después
bordear la ladera en la cual está el camino. Seguimos andando por
este precioso camino que nos lleva hasta un collado desde donde ya se
ve el Auza.
Precioso bosque |
En el bosque |
Bordeamos la ladera del Elorrieta y nos
plantamos en el otro collado, en el que ya se empieza a subir al
Auza. Ponemos a cero el cronómetro y empezamos prácticamente a
correr monte arriba, para ver cuanto nos cuesta subir.
El camino empieza bastante fuerte por
un bosque un tanto inclinado. Luego se suaviza un poco y acaba
saliendo al collado entre el Auza y Arrigorri. Ahora ya si que
tenemos la pala final del Auza delante nuestra, por lo que hacemos un
último esfuerzo y nos plantamos en la amplia cima. Nos ha costado
unos 40 minutos desde que hemos puesto el cronómetro.
Última subida al Auza |
En la cima del Auza |
Ahora ya a la bajada, más tranquilos,
cogemos impulso por la ladera herbosa del Auza y nos vamos a la cima
del Arrigorri. Nos recibe una multitud francesa, que pronto nos deja
sitio y nos quedamos solos en la cima. Tras un par de fotos seguimos
bajando por el bosque hasta el collado del inicio. Como todavía es
pronto, y no hemos tenido suficiente, acabamos subiendo al Elorrieta.
En la cima del Arrigorri |
Bajando hacia el collado del Elorrieta |
De vuelta al coche |
Ahora ya si que sí, nos bajamos
definitivamente al coche. Pero en vez de bajar por el bosque que
hemos subido, nos vamos hacia el Olate y bajamos más directamente al
coche, por una zona de palomeras.
Bueno, pues ya estamos en el coche. ¡Ya
hemos hecho algo! que mejor que no hacer nada ya es. Ahora ya solo
queda volver a casa y vencer la tentación de parar en Oronoz Mugairi
a comer alubias rojas.
Un saludo y a disfrutar del monte!!